Desde tempranito, Parque Viva se fue llenando de gente: familias completas, grupos de amigos, aficionados de toda la vida y también mucho “geek de la velocidad” con cámaras, drones, celulares y hasta cronómetros listos para analizar cada vuelta como si fuera data en tiempo real.

En pista, los autos empiezan a formar, calientan llantas, se acomodan en la parrilla… y el ambiente se siente como lobby de videojuego antes de que arranque la partida ranked: todos listos, todos concentrados, todos con esa mezcla de nervios y emoción.

Las 3 Horas no son solo una carrera:

son como un maratón de estrategia + velocidad + resistencia, donde cada equipo tiene que pensar en:

- Consumo de combustible

- Cambio de pilotos

- Desgaste de llantas

- Ritmo de carrera

Y un pequeño detalle: no cometer errores a más de 200 km/h

El mood en La Guácima: entre festival y gran premio

Mientras los autos rugen en la pista, alrededor el vibe es casi de concierto:

Food trucks con hamburguesas, tacos, choripanes y refrescos por todo lado.

Gente tomando fotos en cada rincón, buscando el mejor ángulo para subir el reel del día.

Niños con protectores de oído pero con los ojos brillando cada vez que un carro pasa full acelerado frente a la grada.

Fanáticos comparando tiempos, hablando de alineación, setup, frenos, aerodinámica… y sí, también apostando informalmente por “su” equipo favorito.

Todo está listo: el sol arriba, el asfalto caliente y la vibra al tope. Se sienten los latidos del público subir al mismo ritmo que las revoluciones de los motores.

3 Horas a fondo: no es solo ir rápido, es saber cuándo

Aquí no se trata solo de quién acelera más fuerte. En una carrera de resistencia como esta:

Un piloto puede arrancar muy agresivo, pero si quema llantas de más, lo paga al final.

El equipo que mejor haga sus paradas en pits puede ganar segundos clave.

Un safety car puede cambiar toda la estrategia en un par de vueltas.

Es una mezcla de ajedrez y videojuego de carreras:

tienes que pensar como estratega pero reaccionar como gamer con reflejos de milisegundos.

El momento clave: luces rojas, silencio… y explosión

Llega el momento. Los autos en la parrilla.

Luces rojas encendidas.

Por unos segundos, el público baja el volumen…

Se apagan las luces.

Y ahí sí: Parque Viva explota.

Motores al máximo, el grito de la gente, la primera curva, los primeros adelantamientos… y oficialmente quedan inauguradas las 3 Horas de Costa Rica 2025. A partir de aquí, cada vuelta cuenta, cada decisión pesa y cada error se paga caro.

Las 3 Horas ya arrancaron, Parque Viva está encendido y el Autódromo La Guácima está en modo máximo rendimiento.

Bienvenidos a esta fiesta de velocidad, estrategia y geekismo deportivo.