Quienes gustan de Hello Kitty y consumen sus incontables productos tienen razones para celebrar este mes, pues la insignia de la compañía japonesa Sanrio cumplió 46 años de existencia.
Dicho esto, me siento en una de esas disyuntivas tipo Matrix: pueden tomar la píldora azul y dejar de leer o decidirse por la píldora roja y enterarse sobre algunas de las curiosidades que seguro no conocían sobre este personaje.
ORIGEN
En 1974, Japón experimentaba el auge de la fiebre por la cultura inglesa, debido a que se consideraba a Reino Unido como el ideal al cual aspirar en cuanto a infraestructura y etiqueta, su cultura asombraba a los nipones en ese entonces e incluso consideraban a Londres como la ciudad ideal para vivir y tener hijos.
Con eso en mente, el presidente de la empresa Sanrio, Shintaro Tsuji, encargó a la diseñadora Yuko Shimizu elaborar un dibujo tierno (kawaii) para vender monederos y exportarlos a nivel internacional.
Así nació Hello Kitty… vaya humilde origen para un personaje que en la actualidad vende unos 7 mil millones de dólares en productos y negocios licenciados cada año.
Hello Kitty se hizo sumamente exitosa desde entonces, volviéndose capaz de vender todo en lo que pusieran su imagen hasta convertirse en un monstruo del merchandising japonés. Sin embargo, en tierras occidentales se difundió el rumor de que este fenómeno tendría un origen sobrenatural y maligno.
¿LA MANO DEL CACHUDO?
De acuerdo con estas versiones, Yuko Shimizu tenía a su hija con un cáncer terminal de boca al momento de la creación del personaje. Se cuenta que la diseñadora habría hecho un pacto con el diablo, quien a cambio de reclutar a millones de seguidores en sus filas le cumplió la milagrosa curación que su hija necesitaba.
Quienes difundían estos rumores señalaban que, de esa manera, cada vez que se compraba uno de los productos kawaii de este personaje indirectamente se estaba financiando al cachudo. Como Shimizu dejó Sanrio tiempo después de crear a Hello Kitty, eso avivó los rumores.
Presuntamente, ese sería también el motivo por el cual este personaje no tiene boca. De igual forma, se trataría de una gata porque a dicho animal se le relaciona con la brujería. Y así, poco a poco, se fueron haciendo más conjeturas y sacando más conclusiones al respecto.
Por supuesto, no existe manera de confirmar o negar semejantes afirmaciones, aunque siempre cabe aclarar que para esos tiempos era común que se relacionara con satanismo el éxito comercial arrollador de cualquier producto, en especial si no era occidental.
Asimismo Yuko Yamaguchi, tercera diseñadora y actual encargada del personaje, desmintió dicho rumor en una entrevista para la revista TIME en agosto de 2008 y se tomó la molestia de explicar el motivo por el cual Hello Kitty no tiene boca.
De acuerdo con Yamaguchi, de esa manera quien la mire reflejará su estado de ánimo con la expresión neutra del dibujo, lo cual generará empatía y este le agradará, por lo cual estamos hablando de un efecto psicológico para cautivar la atención de los compradores.
¿ES UNA GATA?
La antropóloga Christine Yano elaboró un estudio con respecto al fenómeno que supuso este personaje en la cultura popular y recibió una corrección respetuosa, pero firme, por parte de la mismísima compañía Sanrio tras referirse a Hello Kitty como una gata en el borrador del guion elaborado para una presentación.
Yano declaró a LA Times en 2014 que la compañía le indicó: “Hello Kitty no es una gata. Ella es un personaje animado. Es una niñita. Es una amiga. Pero no es un gato. Nunca se presenta en cuatro patas. Camina y se sienta como una criatura de dos patas. Sin embargo, sí tiene como mascota una gatita que se llama Charmmy Kitty”.
De hecho, en la biografía oficial del personaje se indica que su fecha de nacimiento es el 1 de noviembre, que por cierto comparte con Tomokuni Tsuji, el actual presidente de Sanrio, por lo tanto, es del signo zodiacal Escorpio.
Asimismo, nació en Londres. A estos datos, la antropóloga agrega que su nombre real sería Kitty White, así como que sus padres se llaman George y Mary White y que tiene una hermana gemela llamada Mimmy.
Si el hecho de que Kitty tenga una hermana gemela les genera una duda existencial acerca de cuándo están viendo a una y cuándo a la otra, basta con que se fijen en el color del lazo que portan, pues Kitty ama el color rojo y Mimmy es fanática del color amarillo. Aparte, si se preguntan cómo reconocerlas cuando usan colores distintos, el lazo de Mimmy siempre va al lado izquierdo de su cabeza y el de Kitty al lado derecho.
Para concluir, recuerden que nada es lo que parece y el mundo siempre puede sorprendernos… Hace unos minutos, antes de decidirse por la píldora roja, ustedes no sabían que Kitty White se llamaba así, tampoco que fuera británica, que tuviera una hermana gemela ni mucho menos que se trataba de una niñita.