La casa de Ahmed Bin Fahad es un paraíso Nintendero. ¿Porqué? Simple. Él tiene la mayor colección de Nintendo del mundo con más de 8000 piezas dedicadas al universo de la compañía.
El árabe tiene desde periféricos hasta productos exclusivos, además de que su colección está valorada en más de 350.000 euros y comenzó a formarla desde 1986 cuando sus padres le compraron la NES. Desde ese momento, Fahad cuenta en una entrevista para Nintendo Life que empezó a pedir a sus padres «lo último en consolas y juegos» y a «guardar las cajas más antiguas en un lugar seguro».
Evidentemente, esto requiere tiempo y paciencia:
«Los videojuegos son divertidos y coleccionarlos lo es aún más. No pienso que comprar juegos sea una pérdida de dinero. Guardar mis juegos antiguos me ha pertmitido ganar el Guiness World Record por mi colección.»
Fuente: Nintendo Life