Los escándalos por las apuestas de CS: GO le abrieron los ojos a muchos, en especial porque las medidas de regulación de los eSports deben cambiar. Recientemente, una nueva autoridad llamada eSports Integrity Coalition ha sido creada con base de operaciones en Londres y sin ánimo de lucro. Su objetivo será el de regular una industria que, debido a la enorme cantidad de dinero que genera, es prácticamente irregulable.
La asociación pretende estandarizar una serie de códigos de conducta, normas y vigilancia anticorrupción y antidopaje, además de contar con capacidades de investigación y sanción hacia los que incumplan dichos códigos. El crecimiento exponencial de esta disciplina ha sido tal, que en la actualidad se calcula que estos deportes mueven cerca de 200 billones de dólares tanto en el mercado normal como en el clandestino.
«Esto ha provocado que gente a la que no le interesaban los videojuegos esté interesada en los eSports por razones evidentes, y Y si queremos combatir contra eso, contra las trampas y la corrupción, vamos a tener que ir a la raiz del problema.»
El plan de la ESCI es lograr que todas las compañías se unan a su causa, aunque de momento la única que lo ha hecho ha sido Ubisoft.