La personificación del personaje juega un importante papel en este hobby.
¿Por qué razón hacer Cosplay? Es una pregunta que las personas que hacemos Cosplay escuchemos muy a menudo, en especial con las personas curiosas que nos preguntan de qué se trata y que para qué se hace. Puede que para algunos sea un simple hobby, para otros una forma de obtener ingresos y hasta un estilo de vida.
Al hacer un Cosplay siempre nos preocupamos por la utilería, las telas, lentes o pelucas, pero hay algo muy importante que muchas veces no se toma en cuenta: el estudio del personaje.
Puede que para muchos esté de más, pero personificar cuando se hace Cosplay le da un toque especial al resultado final.
El actor-director-dramaturga ruso Konstantín Stanislavski, ideó un método o sistema que les permitía a los actores convertirse en alguien más en escena.
El sistema Stanislavski consiste básicamente en hacer que el actor experimente durante la ejecución del papel emociones semejantes, parecidas a las que experimenta el personaje interpretado; para ello se recurre a ejercicios que estimulan la imaginación, la capacidad de improvisación, la relajación muscular. Es decir, hablar, caminar y hasta respirar como el personaje.
Stanislavski, creía firmemente en el estudio del personaje como la clave para realizar una excelente interpretación. Conociendo un poco sobre este sistema, si lo aplicamos a la hora de presentar nuestros Cosplays en convenciones, sería mucho más interesante y llevaría nuestros trabajos a otro nivel.
A la hora de posar, de caminar y hasta cuando se realizan presentaciones en tarimas podemos ver que tan apegados o parecidos somos con el personaje.
En nuestro país tenemos gran variedad de cosplayers fabulosos, entre ellos Ariela Quirós. Me parece la persona más apropiada para hablar un poco sobre el tema y dar a conocer más sobre ella, ya que es una de las cosplayers que llevan sus trabajos “más allá” con su peculiar caracterización, robando miradas por donde sea que vaya y no por mostrar su cuerpo, pero por sus excelentes caracterizaciones y por supuesto sus trabajos.
“Para mí es clave. Si se personifica, es Cosplay, si sólo se usa, es disfraz” – Ariela Quirós
Ariela nos dio un poco de su ajustado tiempo para responder las siguientes preguntas:
¿Cuándo y cómo iniciaste en el Cosplay?
Resulta ser que desde que estaba pequeña (más pequeña) siempre tuve cierta afinidad por los disfraces y la caracterización; buscaba pintarme la cara con algo curioso o ponerme algún disfraz que tuviera de una fiesta del Halloween pasado, pero creo que inicié “oficialmente” por ahí del 2011, para esa época aún estaba en el colegio y me gustaba mucho el mundo de Tim Burton.
Dado que para los últimos meses del periodo lectivo normalmente se hacen despedidas y actividades especiales para los Quintos años, aproveché que una de las “actividades” era precisamente llegar disfrazado. Yo pasaba mucho tiempo viendo fotos de cosplayers internacionales y me ilusionaba con poder llegar a hacer algo así… algún día, y esta fue la oportunidad perfecta para iniciar en un ambiente no tan abierto como lo sería una convención regular. Me emocioné demasiado por hacer mi primer Cosplay… aunque fuera para llevarlo al colegio. ¡Ah sí! El primer ‘Cosplay’ de Ariela fue Willy Wonka, y fue también la primera vez que intenté hacer props, como lo fue el bastón y el sombrero de Willy, así como el broche de “W” que lleva en el cuello. Todo eso se hizo con confeti, varillas, plástico adhesivo, y papel aluminio ¡Puro Reciclaje! Y hasta la fecha sigo usando ese bastón. No será perfecto ni profesional, ¡pero fue mi primer prop!
¿Qué es lo que más te gusta de este arte?
Hay dos cosas que me encantan: La posibilidad de traer a los personajes que tanto amo a la realidad, y la gente tan impresionante que uno llega a conocer por medio de esto. Para mí, el Cosplay no es solo llevar un traje bonito y llamativo, es sacar la fantasía de los libros y de las pantallas y traerla a la vida.
¿Qué talentos o condiciones se necesitan para ser cosplayer?
El talento es bastante útil, pero no creo que sea esencial, lo mismo para las condiciones. Cualquier persona puede ser cosplayer. No pienso que esto tenga un límite o restricciones porque no todos tienen que usar los mismos recursos. De hecho, cada quien puede crear cosas impresionantes con lo que tiene a la mano. Hay personas que trabajan excelente el foam, como hay otros a los que le funciona mejor la madera de balsa o el cartón. En el Cosplay lo que entra en juego es el ingenio; el “¿Con qué hago esto? ¿A quién le pregunto sobre aquello? ¿Cómo logro que esto gire y no se caiga? Aparte de esto, la investigación es un factor importante así como el mantener la mente abierta. Las ideas y los materiales no van a caer del cielo y tampoco van a salir de un frijol. Hay que pensar y buscar y *mantener la calma*.
¿Cuantas cosa he mencionado? ¿Dos o tres? Ah sí, muy importante: ¡El amor! Las cosas hechas con amor siempre van a salir bien. En resumen, paciencia, ingenio, investigación, recursos, y amor. Amor, amor, amor hace al mundo girar ♪
¿Qué criterios usas para seleccionar los personajes que representas?
Más que todo el cariño que le llego a tener al personaje… cariño o admiración. Normalmente no me voy por un traje bonito o por qué tan geniales son los poderes que tiene, sino que me guío por alguna característica que yo tenga en común con ese personaje o que quisiera tener. Digamos que mi selección de cosplays no se da sentándome a pensar “que próximo cosplay hago”, sino que se da cuando llego a conocer un personaje que resulta gustarme mucho. Por ejemplo, el Sombrerero Loco, Peter Pan, Chaplin, Jack Frost… estoy enamorada de todos ellos. Los vi una y otra y otra y otra vez y dije “Lo amo. Tengo que ser él. En él veo fuerza, despreocupación, locura, valentía, disciplina, inocencia, respeto…” tantos valores tan bonitos que tal vez no noto o no poseo en la vida real… o que tal vez no me atrevo a demostrar.
En el caso de los personajes femeninos, normalmente son personajes que admiro por su actitud, o porque de verdad siento que su personalidad concuerda un poco con la mía… si somos tal para cual, ¿por qué no?
¿Cuál es tu personaje favorito?
¿Para cosplay? Que difícil…. ¡Es que todos me gustan! Pero si tomo en cuenta la comodidad, el cariño hacia el personaje, el estado de ánimo en el que me encuentro cuando lo uso y unido a las sonrisas de la gente: Chaplin y El Sombrerero Loco. Ellos son tan puros para mí ¡Son la bomba! Adoro ese bigote y esos ojillos locos, aunque los zapatos son dolorosos después de unas cuatro horas.
¿Cuánto tiempo puede tomarte preparar un personaje?
Creo que podemos dar un rango de 3 a 6 meses, más que todo porque por ahora los trajes han sido sencillos, y con eso me refiero a que no llevan armaduras ni grandes accesorios. Perfeccionarlo si requiere un poco más, porque cada vez que uno viste el Cosplay, llega a notar un detalle que puede mejorar para la próxima vez. Jack Sparrow tiene un par de años ya y todavía veo cosas que hay que mejorarle. Yo creo que en esto uno no encuentra el límite fácilmente.
Y bueno, si hablamos de los trajes “más complicados”, hasta ahora lo más que he durado han sido unos seis meses, como con el casco/traje de Midna o el vestido de mariposas de Effie. ¡Ese vestido y ese casco! Un día me los pondré al mismo tiempo: El Crossover de los 365 días.
¿Qué tan importante es la personificación completa de un Cosplay?
Para mí es clave. Si se personifica, es Cosplay, si sólo se usa, es disfraz.
Al principio, cuando no conocía a muchas personas, sí me enfocaba mucho en esto de personificar al 100%, pero conforme fui conociendo amigos, se volvió un poco más complicado ya que uno entra en un estado de alegría “inusual” que lo saca a uno del personaje. Sucede que está Arielilla posando con alguien y ve a un amigo ahí a lo lejos y de repente se le sale todo el arcoíris y la felicidad: chilla y sonríe aunque el personaje tenga que ser la cosa más seria del mundo. A veces no se puede evitar.
Aun así, siempre me parece importante entrar en la mente del personaje cuando se posa o se camina entre la gente. Esto le da mucho peso al Cosplay. A mí me interesa que la gente vea a Chaplin, no a Arielilla vestida de Chaplin. Igualmente, es muy distinto ver a un Jack Sparrow caminando femenino y cuidadoso, a uno balanceándose en estado de ebriedad y guiñándole a las señoras mayores.
No es solo verlo, es sentirlo, al final uno los siente tanto que llega a desarrollar personalidades múltiples! A ratos usted va a ver al Guasón haciendo el Futterwacken con bastón, sombrero de copa, gritando “PUDÍIIIN” y ebrio. Cuando es Cosplay, desaparezco.
¡Jack Sparrow! (Click para ver video)
¿Qué consejos puedes dar a alguien que desea comenzar en este mundo?
1) No desesperéis por sacar un traje rápido. Tampoco os frustréis si os parece muy complicado. ¡Siempre hay maneras de hacer las cosas! Es cuestión de investigar opciones.
2) Haced las cosas con cariño y con paz. ¡Todo a su tiempo! Procurad dedicar el necesario para que las cosas salgan bien.
3) No tengáis miedo de pedir ayuda: ¿No sabéis donde conseguir algo? ¿Cómo armar algo? ¿Cómo endurecer algo pero que no se haga muy pesado? ¿Conseguir una textura? ¡Preguntad! Nadie os va a morder por pedir ayuda.
4) No os rindáis. Si las cosas no salen bien hoy, mañana las veréis con otros ojos y pensaréis en algo mejor.
— Uno extra: Si llegáis a ser una eminencia, procurad que no se te suba la idea a la cabeza. Ayudad y dejad que os ayuden. Apoyad a quienes os apoyan, y no veáis a los que recién comienzan por encima del hombro. Así vais a disfrutar de todo y podéis transmitir lo que habéis aprendido con el tiempo. Mejor ser amado que temido.
¿Cuál es la razón por la que hacés cosplay?
Me preguntás eso y sólo veo al techo y sonrío. Son muchas cosas. Es un escape del mundo. Es un escape de la rutina, de lo frío y lo rígido. Con el Cosplay soy lo que quiero, siento lo que quiero, y hago realidad mi fantasía.
Se desarrolla la creatividad, se aprenden nuevas técnicas, se aprende sobre uno mismo y sobre los demás. Ahora he llegado a un punto en el que no sólo me emociona hacer el Cosplay por mí, sino por aquellos que sé que aman el personaje tanto como yo y se van a sentir emocionados de poder tener una foto con éste para conservar en el recuerdo.
La posibilidad de hacer no solo mi día diferente sino el de los demás también es algo que no se compara. No hay cosa más linda en esto que encontrarte a tu personaje de infancia favorito o al héroe que más admirás desde que estás pequeño.
Gracias al Cosplay, puedo sonreír y provocar sonrisas.
Después de saber un poco más de Ariela, ver más allá de sus cosplays y conocer sus motivos y alegrías, podemos concluir con el Cosplay es algo que se hace para disfrutar y entregar, por lo que debemos entregar nuestro 100% en cada trabajo que hagamos.
Agradamientos especiales a Ariela por la pequeña entrevista y por ser tan auténtica.
[gmedia id=49]Por Joe Arias