Si algo ha caracterizado a Nintendo, es su tradicionalismo, que lo ha llevado a tener una política cerrada a la occidentalización, y sobre todo a la adaptación a los tiempos modernos. Sus estrategias si han ido evolucionando claro está, son un icono de la innovación, pero esta innovación no siempre ha ido de la mano con las tendencias de la actualidad, sobre todo en occidente, donde el mercado es enorme y el mas influyente.
Pero al parecer todo está a punto de cambiar, habrá una gran revolución en las políticas de comercio de la gran N, o al menos así lo hace ver el CEO de la compañía, Tatsumi Kimishima, quien asegura que “la compañía verá cambios muy importantes en el sistema de gobierno corporativo mediante la creación de una comisión de auditoría y supervisión, así como como la introducción de un nuevo sistema ejecutivo”. Esto incluye la formación de una delegación formada por consejeros externos, como Fils-Aime y Satoru Shibata, COO de Nintendo América y CEO de Nintendo Europa respectivamente.
Este cambio radical, y que ciertamente responde a la súplica del público en general (y la experiencia obtenida en la actual generación de consolas), será toda una realidad cuando la junta general de accionistas apruebe los estatutos empresariales que implican esta reforma, los cuales se espera sean aprobados el 29 de junio. Según Kimishima,” el propósito de estos cambios es separar el negocio actual de la toma de decisiones y mejorar la supervisión”.
De esta manera Nintendo tendrá una respuesta mas globalizada ante los cambios del mercado de los videojuegos actual. Esperamos que estos cambios traigan a la cima de nuevo a la Gran N, que ciertamente no tuvo su mejor temporada en esta generación; confiaron mucho en su tradicionalismo, y no se amoldaron tanto a la actualidad, ahora se dieron cuenta de que esto pudo ser un error y al parecer, no iran de nuevo por ese camino.