PETA se ha pronunciado (muy estúpidamente) sobre uno de los mini-juegos de 1-2-Switch. Gracias a un comunicado dirigido a Nintendo, la organización ha protestado por la representación del acto de ordeñar una vaca en el juego, y han solicitado una simulación más realista del acto.

Informan desde Heatstreet, que la organización ha mostrado su descontento con el juego ya que lo que hicieron fue «eliminar la crueldad del ordeño«:

«Para simular correctamente el ordeño de las vacas, 1-2-Switch necesitaría mostrar todos los aspectos de la ganadería lechera, incluida la violenta inseminación de las vacas en lo que la propia industria lechera denomina estantes de violación.

Una vaca madre bramará por su becerro durante días después de que le quiten a su cría. A lo mejor podríais añadir dichos sonidos a su juego para recordar a los jugadores que, al beber leche, la gente apoya a una industria que separa a madres de sus hijos».

Si esto te parece estúpido, añadieron que, si estos maltratos resultan demasiado angustiosos para la compañía, Nintendo podría probar a «simular actividades en las que ningún animal sufra como, por ejemplo, un minijuego dedicado a recoger almendras para hacer leche de almendras«.

Como sabrás, estas acusaciones sin sentido alguno van dirigidas a un videojuego donde no se hiere a ninguna vaca, animal ni nada por el estilo. ¿Irá Nintendo a publicar algo al respecto? Por un caso tan estúpido, lo dudo.