Un término del que poco se habla pero que con el tiempo ha tomado popularidad a nivel mundial es el de “Blue Monday”, el cual se refiere al tercer lunes del año y en algunos casos se cataloga como el día más triste.
Según National Geographic este concepto surgió hace aproximadamente 20 años, por parte del psicólogo Cliff Arnall, quien realizó una investigación y desarrolló una fórmula tomando en cuenta elementos como el clima, los gastos realizados durante Navidad, e incluso la desmotivación por falta de metas para el siguiente año.
La experta en Psicología, la Dra. Shirley Zúñiga, del Hospital Clínica Bíblica, amplió cómo este concepto nació fuera de nuestras fronteras, a raíz de aspectos propios de la época. “El término se inició en países del hemisferio norte, en los que está época representa días fríos, de lluvia, oscuros sobre todo en donde las personas de estos sectores empiezan a tener sentimientos melancólicos.”
La especialista explica que las personas vienen de cambiar horarios durante las fiestas, sumado al trabajo que generalmente inicia con más cargas al año, y con menos holgura económica. Ante este panorama, entran en estrés, ocasionando afectaciones incluso físicas en el sistema digestivo, cardiovascular, sanguíneo, entre otros.
Para combatir esta situación, lo que se debería buscar en estos casos idealmente es la activación del sistema parasimpático, ese que relaja, que genera oxitocina y por ende sentimientos más positivos, contrarrestando los efectos del “Blue Monday”.
La doctora Zúñiga señala 3 tácticas sencillas y ejecutables para sentirnos mejor en este inicio de año y restarle estrés al cuerpo a través de herramientas que relajen la mente y el organismo:
- Ordene la casa: Acomodar el espacio que nos rodea en la mente, tales como patrones de conducta, recuerdos, acciones a corregir y analizar de dónde vienen para ponerlos en el lugar donde pertenecen. Poder distinguir pensamientos “buenos y malos” según la realidad de cada persona y así darle paso a los que nos suman a través de la meditación, oración, conectando con el ser interno de cada uno por medio de esta práctica le ayudará a relajar el organismo y entrar en un estado distinto.
- Haga un recuento del foco de su estrés: Tanto en el área física, emocional y financiera si aplica. Puede hacer una lista de todo lo que quedó pendiente desde el año anterior y que necesita resolver, iniciando con lo más urgente de primero.
- Establezca prioridades, metas cortas y realistas: Propóngase a realizar una lista en los aspectos físicos, emocionales y financieros, con fecha para poder ejecutar cada plan de la mejor manera posible.
Asimismo, la psicóloga invita a las personas a reconocer cuándo es necesario iniciar un proceso con un profesional de la salud mental. Este tipo de apoyo le ayudará a mantener la disciplina y a tener una guía experta si así lo necesita.
Recuerde, lo que no se mide no se mejora; evalúe estos avances en un lapso de 6 a 8 meses para que pueda llegar a final de año de manera distinta a como empezó. El Hospital Clínica Bíblica pone a su disposición charlas gratuitas y virtuales, donde podrá aprender más de estos temas, con el fin de tener una vida más equilibrada.