Sobre la autora

Emilia Macaya Trejos nacida en Costa Rica. Es filóloga, escritora de novela y ensayo, además de profesora catedrática de la Universidad de Costa Rica.

Realizó sus estudios primarios y secundarios en su natal Costa Rica. Después de dos años en Europa y una vez concluida la Licenciatura en Filología por la Universidad de Costa Rica, realizó estudios en la Universidad de Mc. Gill y en la Universidad de Montreal, ambas en Canadá. En esta última obtuvo un Doctorado en Literatura.

Fue decana de la Facultad de Letras de la Universidad de Costa Rica. En su carrera como docente además fue profesora catedrática en las ramas de literatura riega, las teorías del género y literatura latinoamericana. Profesora invitada de la Universidad de Montreal y Universidad de Concordia (Canadá), así como en la Universidad de Extremadura, España. Ha publicado numerosos artículos y estudios en revistas académicas especializadas. Se han destacado sus estudios y reflexiones sobre la literatura femenina en general y sobre las letras hispanoamericanas en particular, diseminados en revistas, periódicos y conferencias.

Entre su obra narrativa se puede contar La sombra en el espejo (1986), ganador del Premio Ancora de Literatura 1987-1988, Diez días de un fin de siglo (1997) y Más allá del río (2020), ganador del Premio Nacional de Literatura Aquileo J. Echeverría 2020, del cual hablaremos a detalle más adelante.

En lo que respecta a ensayo figuran Cuando estalla el silencio (1992) que es un estudio sobre el discurso de la femineidad y Espíritu en carne viva (1997). Así mismo es miembro de número de la Academia Costarricense de la Lengua desde agosto del 2020 donde ingresó con su discurso: “De Pandora a Penélope: el cuerpo femenino del lenguaje”.

La novela

Se trata de una novela de “época” con tintes históricos que se enfocan más en lo doméstico que lo histórico. Según confirma la propia autora se basó en dos rumores para montar el concepto de la novela: existió un edicto que libraba de la ejecución al General José María Cañas y que el mismo mantenía un amorío con la esposa de un ministro del gobierno de Juan Rafael Mora Porras.

Si bien es cierto se sitúa a los hechos ocurridos después de la Campaña Nacional de 1856- 1857 contra los filibusteros para expulsarlos de Nicaragua y evitar la invasión de Costa Rica, no deja de hacer referencia a algunos hechos históricos acontecidos durante la misma. Con la excusa de que una viuda acaudala se propone investigar qué sucedió con el edicto saldrán a la luz muchas situaciones domésticas y cotidianas que no son del todo ajenas para quién las lee.

Como en toda buena historia cada personaje tiene su encanto y a la vez sus secretos que no quiere que nadie descubra. El inspector Espada será el personaje desde el cuál se irán juntando todos los puntos y con el cuál iremos descubriendo que no se trata realmente sobre el edicto que le mandaron a investigar. Cada uno de los personajes desde su punto de vista irá brindando información valiosa que nos harán comprender poco a poco cuál la verdadera trama de la historia.

Los personajes son tan bien construidos y tan reales que es imposible no preguntarse si realmente existieron. Sobre lo anterior la autora confirmó que si bien ellos no existieron directamente, existen montones de Azucenas y Jaimillos en los que pudo basarse para crear sus personajes. Si les gustan las novelas con tintes históricos pero que realmente se tratan sobre secretos de pueblo este es un libro que no pueden dejar pasar, no por nada obtuvo el Premio Aquileo Echeverría 2020.