Summer Catchers no es el juego que esperábamos, pero entretiene chocar y destruir nuestro carro.

Summer Catchers es un juego publicado por Noodlecake Studios, del cual estuve siguiendo un rato por el estilo de indie que me parecía iba a ser. El juego en realidad tiene de todo un poco, aunque esperaba toparme con un plataformero y terminé jugando un runner infinito con mucho carisma.

En el juego tomaremos el papel de Chu, una joven chica que vive al norte en una montaña congelada y quiere irse de ahí. ¿Quién no? Hace demasiado frío donde vive. Ella, con ayuda de un lobo se embarca en una aventura para tratar de encontrar el verano y para lograrlo utilizará un carro de madera que deberá conducir.

Aquí es donde viene lo más interesante de la jugabilidad, ya que el carro se destruirá tantas veces en el camino que nuestra misión es recolectar hongos (la moneda del juego) para repararlo y comprarle objetos que nos permitirán seguir avanzando en los peligros del bosque.

Corriendo sin fin por un bosque congelado

Cada uno de los recorridos que hacemos en el juego es único, por lo que ningún escenario se repetirá. Es por eso que debemos mantener un buen stock de objetos para avanzar y cumplir con las misiones que se nos dan.

Cuando llegamos a nuevos destinos, Chu encontrará lugares para reparar su carro, hacer más misiones, comprar más objetos y hasta nuevos vehículos. En general, Summer Catchers mantiene un estilo artístico muy bonito con el ya clásico pixel-art, y el juego en sí nos invita a seguir explorando e intentando avanzar, aunque al inicio apestemos un poco al no saber bien cómo sincronizarnos.

Antes de avanzar en la historia de Summer Catchers es importante cumplir las misiones que nuestros amigos nos asignan. Muchas de ellas implican mejoras y nuevas herramientas, por lo que siempre estaremos ocupados intentando avanzar y no morir tan rápido. Lastimosamente, este sistema de misiones es realmente tedioso y cuando nos quedamos sin objetos, simplemente moriremos y tendremos que volver a hacer otro recorrido con nuestro carro.

Comentarios finales

Aunque Summer Catchers no se va a convertir en mi juego preferido y sus mecánicas me tomaron por sorpresa, la realidad es que hay muchos coleccionables dentro del juego, además de secretos por descubrir, entre los que veremos criaturas místicas y hasta mini-juegos por probar.

Fuera de eso, el estilo de arte es hermoso y se mezcla muy bien con una banda sonora que nos invita a la aventura. Es relajante y a la vez nos llena de adrenalina. Si las mecánicas de juego hubieran sido mejores o distintas, creo que el juego sería aún más atractivo y más jugadores le darían la oportunidad.

Review del juego realizado gracias a un código facilitado por Noodlecake Studios.