¿Qué sucedería si están trabajando tranquilamente cuando de repente un “invasor” aparece en su lugar de trabajo reclamándolo como su nueva base de operaciones?
Peor aún, saber que este tiene fuerza y poderes que están por encima de tu entendimiento a pesar de ser tierna y un poco torpe. Ika Musume es un anime que cautivó mi atención desde el primer momento.
Sin duda este animé está cargado de comedia, romance si se le podría llamar así, experimentos extraños y personas muy particulares. Lo que más me atrajo fue la idea de una chica calamar, eso fue lo primero que llamó mi atención y para terminar de rematar, esos tentáculos tan geniales que ella posee y que parecen pelo le da un aire muy gracioso e interesante a esta serie.
Esta historia gira en torno a una chica calamar llamada Ika Musume, quién se ha propuesto a conquistar la humanidad como venganza por la contaminación del océano. Su primer objetivo es hacer su base la casa de playa llamada Lemon, propiedad de las hermanas Aizawa. Sin embargo, cuando rompe la pared de la tienda accidentalmente con sus tentáculos, se ve obligada a trabajar como camarera para pagar los daños.
Aparte de ser camarera, es obligada a escupir su tinta para que puedan cocinar platillos en el restaurante. Sin embargo esta chica es muy enérgica y no tendrá problema alguno para trabajar en allí; y curiosamente es muy inútil para invadir pero posee habilidades un tanto sobrehumanas en deportes, matemáticas y artes cuando utiliza sus tentáculos.
Los capítulos de esta serie son experiencias y aventuras que Ika-chan va a tener a lo largo de toda la historia, contando ambas temporadas. Ella poco a poco comienza a aprender sobre la vida humana, adaptarse y va percatándose que no toda la humanidad es mala. Ya que, aunque a veces la traten un poco mal o la exploten laboralmente, conoció a personas buenas que la quieren, se preocupan por ella y que generaron un lazo muy fuerte hacia ella.
Entre todos los animé que he visto, este es uno de aquellos que recomendaría sin pensarlo. Si quieren reírse un rato, incluso llorar, ya que hay un capítulo en específico que me sacó lágrimas; este animé debe estar en su lista “por ver” o “por descargar”.
El diseño de los personajes es agradable, las aventuras que viven son entretenidas y te mantienen al hilo a pesar que cada capítulo comprende tres historias distintas con Ika-chan y su nueva familia de la superficie más los amigos que ha conocido.
La animación está muy bien realizada, hasta el coloreado es muy bueno y bien acabado. Algo interesante pero predecible, es que Ika-chan siempre incluye las palabras calamar y tentáculos en cada oración.
No pueden dejar pasar este anime tan genial. Los momentos de comedia que vivirán serán épicos y no pararán de reírse.
Por Daniel Zúñiga