En Costa Rica se ha empezado a dar una disposición significativa hacia prácticas financieras más saludables; sin embargo, aún se mantienen comportamientos preocupantes que deben ser abordados mediante la educación financiera.
Esta es una de las principales conclusiones del estudio “Cultura financiera de los ticos en la era digital”; elaborado por la firma STAMINA, y liderado por los investigadores Carlos Meléndez, María José Peraza, y Sebastián Pereira.
Precisamente, la investigación, que fue presentada en el evento "Potenciando el Ecosistema Fintech", organizado por el Capítulo Fintech de la Cámara de Tecnologías de Información y Comunicación (CAMTIC), el pasado 5 de junio, señaló que los costarricenses colocaron el ahorro como una de sus prioridades para este 2024. Esto ya que el 71,3% de los encuestados afirmó que durante este periodo “están enfocados en ahorrar tanto dinero como les sea posible”, mientras que el restante 28,7% no comparte esta meta.
Para alcanzar este objetivo financiero, el 43% de los entrevistados dijeron que utilizan un presupuesto como herramienta que les permita tener un control y seguimiento efectivo de su dinero. No obstante, el 36% se identifica parcialmente con el uso de los presupuestos, mientras que el 21% restante no se identifica del todo con ella.
En este sentido, la investigación encontró una problemática que afecta los hábitos financieros de los costarricenses y es que solo el 19% de los encuestados indicó haber recibido educación financiera durante su crianza. A pesar de ello, señalaron los investigadores, este indicador está en proceso de cambio con las nuevas generaciones.
Carlos Meléndez, quien además es el director de STAMINA, comentó que, en esta arista, los Generación X (de 45 a 55 años de edad) y los Baby Boomers (55 a 70 años de edad) son los que más mencionaron no haber recibido educación financiera durante su crianza, pero también son quienes influyen en que muchos de los Centennials y Millennials (las generaciones más jóvenes) hayan recibido una mejor educación financiera en su crianza.
“La gran mayoría de personas de generaciones mayores debieron aprender sobre la marcha, de cada experiencia que vivieron a nivel financiero. Esto hizo que se plantearan que: ‘mis hijos o a las futuras generaciones no van a tener este problema’. Si bien, en estas nuevas generaciones aún hay un porcentaje que no reciben educación financiera, son las que se están preparando más para hablar sobre finanzas. Las nuevas generaciones están comenzando a mostrar un cambio en la cultura financiera del país”, explicó Meléndez.
Preferencias en medios de pago
En cuanto a la preferencia de medios de pagos, el estudio confirmó que SINPE Móvil se ha posicionado como el preferido en el país, con el 40% de los encuestados señalando que es el que más utilizan.
“SINPE Móvil ha sido sumamente efectivo en la adopción tecnológica en Costa Rica, lo cual, definitivamente, se puede sentir y visualizar en los resultados del estudio”, comentó Meléndez.
Añadió que, en segundo lugar (30%), los ticos prefieren la tarjeta de debido como medio de pago. Asimismo, solo el 10% prefieren realizar sus pagos mediante efectivo, lo que muestra que este medio de pago pierde adeptos de una forma más acelerada y visible. Este mismo resultado (10%) se dio en la preferencia por el pago con tarjeta de crédito, así como en el uso de otros medios de pago.
Meléndez aclaró que, en el caso de la tarjeta de crédito, el porcentaje reflejado no se debe necesariamente a que exista una menor preferencia hacia ella, sino que es porque existen requerimientos por parte de las entidades bancarias hacia los usuarios que dificultan el acceso a esta herramienta financiera.
Adicionalmente, el estudio detectó algunas variables que inciden en el uso de los medios de pagos, donde destacan la practicidad y la seguridad. “Un aspecto que nos llamó la atención es que las personas entre los 45 y 70 años destacan lo relevante que es la seguridad a la hora de utilizar un medio de pago; mientras que los de 18 a 44 años, si bien consideran la seguridad un factor importante, le dan más peso a la practicidad del medio de pago”, destacó el director de STAMINA.
Adicionalmente, el uso de los medios de pagos puede variar de acuerdo con la situación en donde se apliquen. En el caso de SINPE Móvil, este se utiliza más al momento de realizar transferencias pequeñas y rápidas hacia otras personas. Por su parte, la tarjeta de débito se tiende a utilizar más a la hora de hacer compras en comercios físicos o en línea. Por su parte, el efectivo se utiliza principalmente a la hora de realizar pagos de servicios públicos.
“Este último punto puede hacer referencia a cómo se están actualizando las instituciones públicas para recibir pagos, y en cómo están educando a los ciudadanos sobre las alternativas disponibles pagar servicios públicos mediante otras que no sea solo el efectivo. Se puede pensar que los ciudadanos todavía desconocen estas alternativas o que las soluciones en línea ofrecidas por algunas instituciones no son tan amigables con el usuario”, mencionó Meléndez.
Desarrollo de las Fintech en Costa Rica
Otro aspecto que analizó el estudio de STAMINA, fue el conocimiento que tienen los costarricenses sobre las Fintech. Este tipo de empresas desarrollan servicios financieros basados 100% en la tecnología, ofreciendo soluciones digitales que van desde medios de pagos hasta transferencias de dinero y financiamiento alternativo, por lo que han tomado mucha relevancia en la cultura financiera global.
En cuanto al uso de las herramientas financieras digitales que ofrecen las Fintech en el país, solamente el 20% de los entrevistados indica utilizar actualmente o haber utilizado en el pasado alguna de las herramientas desarrolladas por este tipo de empresas.
“Esto demuestra que, si bien el sector va tomando más fuerza y presencia en la mente de los costarricenses, todavía existen retos de adopción de la tecnología y de convencer sobre la diferenciación y el valor agregado que ofrecen las distintas alternativas en el mercado. Una preocupación que surge de los encuestados es la seguridad, principalmente por la atención que dan al ser solamente digital y no presencial. Esta es una limitación bastante grande, que detectamos en el estudio, para que muchas personas quieran llegar a utilizar la tecnología”, resaltó Meléndez.
Entre las fintechs de pagos, transferencias y financiamiento más reconocidas se pudieron identificar: Multimoney, Kash, Monge Pay, Emma Pay y Wink, que en coincidencia son también las que los encuestados declaran haber utilizado más en algún momento.
El estudio se realizó utilizando una metodología con enfoque mixto. En una primera fase se utilizó la técnica de Desk Research, o investigación de escritorio, donde se recopiló información de fuentes secundarias oficiales. En una segunda fase se aplicó una encuesta a 408 costarricenses entre 18 y 70 años, de todo el territorio nacional y de niveles socioeconómicos: bajo, medio bajo, medio-medio, medio-alto y alto, con un margen de error de ±4,9% y con un 95% de nivel de confianza. Por último, se realizó una fase cualitativa por medio de triadas (entrevista grupal con 3 participantes), perfiladas por grupo generacional y entrevistas a profundidad con dueños y dueñas de fintechs que tienen operación en Costa Rica.