Hoy en Revista Yume queremos recordar esos animes y franquicias que marcaron nuestra infancia, por lo que recordamos con cariño series que en muchos casos no teníamos idea que provenían del “País del Sol Naciente”. Estamos conscientes de que no todos (y a todos) nos dejaban verlos por considerarlos “Fábulas chinas satánicas”, pero muchas veces igual lo hacíamos.
Astro Boy: La mayoría de nosotros no había nacido cuando se emitió por primera vez Astroboy en 1963, pero probablemente han escuchado a sus padres o madres hablar de lo increíble que era.
Beyblade: ¡Let it rip! Un anime destinado a vender juguetes, lo hicieron muy bien… ¿Jugaste en los recreos de la escuela con estos “trompos”? Yo sí, hasta me los decomisaron, buenos tiempos. La serie sigue la aventura de un grupo de chicos y su camino para ser los mejores “Beyluchadores” (O algo así) del mundo, la serie no era la gran cosa, lo genial eran los juguetes, de todas formas y colores, hasta los chinos que brillaban y se rompían con solo mirarlos eran bonitos. Un excelente recuerdo de la infancia.
Candy Candy: Mi hermana estaba enamorada de Terry. Yo nunca vi esta cosa, pero sé que muchos de ustedes lo disfrutaron (especialmente mi hermana), y creo que como ella, muchas encontraron su primer “husbando” en esta serie, un clásico.
CyberCat Kuro-chan: Esta cosa era genial, tenía gatos, robots, armas de fuego, abuelitos, un opening incantable, fusiones muy bien detalladas y elaboradas, lo tenía todo, era increíble y un recuerdo genial que muchos guardamos.
Doraemon: El gato cósmico que sacaba siempre cosas de su bolsillo para ayudar a Nobita, que siempre metía la pata, sin duda mi personaje favorito era el inconstante “Gigante” que a veces era bueno y otras un hijo de…
Digimon: Durante el año 2001, se desató la locura, una serie de televisión, figuritas armables en los “quequitos” y el pan cuadrado, juguetes referentes a Digimon en el combo para niños, muchísimos videojuegos para diversas consolas (Los de play 1 eran buenísimos). Digimon es una franquicia que marcó la infancia de muchos de nosotros, nunca te olvidaremos ¡Digimon! Siempre fuiste mejor que Pokémon.
Dragon Ball (Todos los dragon ball): ¿Qué decir de Dragon Ball que no se haya dicho ya? Las peleas eran emocionantes, la historia era interesante para los “nosotros” de ese entonces, se emitió en televisión nacional durante muchísimos años y por ello todos de una u otra forma tuvimos acceso a esta serie. Dragon Ball es un verdadero ícono de infancia para muchos de nosotros, y un recuerdo irremplazable.
Evangelion: Yo no ví Evangelion de niño, pero sé que algunos de ustedes lo hicieron y por eso está aquí, y sé que si no lo pongo en los comentarios me va a llover, entonces este puesto se convertirá en una pregunta ¿Viste Evangelion de niño? ¿Qué te gustaba de esta serie en ese entonces?
Gundam Wing: Esta cosa la vi en canal 33 hace muchísimos años, no sé ni qué hacía ahí, pero me encantaba. Amaba ver a Hiiro autodestruir su Gundam una y otra vez, Deathscythe era lo mejor, viéndolo nuevamente ya viejo y conociendo otras series de la franquicia, esta es bastante inferior. Pero bueno, aún así le guardo mucho cariño a esta cosita fea.
Hamtaro: ¡Los hámsteres! No recuerdo absolutamente nada de esta serie, solo a Hamtaro y a un hámster gris, y a una con un lazo, no más, yo no lo veía, ¡Está aquí por ustedes! (Si quieren ver una versión más adulta, está “Ebichu”, es algo vulgar, se recomienda discreción)
Heidi: ¡Abuelito dime tú! ¿Qué sonidos son los que oigo yo? Heidi no solo fue parte de la infancia de nuestros padres, sino de muchos de nosotros, con la retransmisión que se hizo por ahí de 2002 o 2003, qué se yo… Personas de nuestra generación pudimos apreciar esta linda historia de cabras, pastores, claritas y esas cosas, pudimos soñar, al igual que hicieron nuestros padres hace muchos muchos años, cómo sería comer queso y carne en los Alpes suizos.
Historias de fantasmas: Otro que me perdí, pero varios conocidos dicen que era muy bueno y de verdad asustaba, y por ello me recomendaron ponerlo por acá, seguro ver el nombre y la imagen les traerá lindos recuerdos, y esa es la idea.
Inuyasha: Este no lo vi mucho, entonces tampoco tengo recuerdos de él, entonces no sé qué decir, pero me caía bien Shesshomaru, era simpático, Kagome me caía mal y ya. Espero que ustedes tengan mejores recuerdos de esta serie, y si se animan, nos los cuenten en los comentarios.
Kaleido Star: La historia de Sora en el espectáculo Kaleido, nunca lo vi, yo estaba viejo, bueno si lo vi un poco, por el fanservice, pero poco, era joven y las hormonas estaban alborotadas, qué se yo.
Mazinger Z: Me perturbaba el malo de 2 caras, de verdad me daba como asco, o algo así, no recuerdo mucho de la serie, solo un poco del robot, de la robot cuyos pechos eran misiles, del juego de playstation 1 que era genial, ¡y del álbum de postales que compraba en la escuela y valían 25 colones el sobre! Eso era lo mejor.
Medabots: ¡Más medabots, más poder! Otra serie que no vi mucho porque no era mi tipo (Sí, era un chiquito medio raro), Nuevamente está aquí porque sé que muchos de ustedes si lo recuerdan con mucho cariño. Personalmente lo que si me gustaba era un juego de Gameboy, no el rpg malísimo, sino uno de peleas en el cual, cuando ganabas, te daban una parte del otro, y así, poco a poco, armabas un robot abusivo, era toda.
Megaman: ¡Todos los Megaman! Desde los juegos viejos viejos, pasando por Rush y Protoman y Bass, la Saga X y la Zero, la cosita fea del NT warrior (a mí si me gustaba), y la serie vieja que nunca ví (Esa del Meme Derp). Una franquicia increíble que nos dio cientos de horas de diversión.
Monster Rancher: Genki entró en un playstation 1 y así empieza nuestra serie, con el pato raro, el ojo, el golem, la succuba, y el genial lobo con cuernos, y el conejo rarito, y Moo, el maligno Moo, la serie no era gran cosa, pero para pasar el rato estaba bien.
Pokémon: El boom de Pokemon fue similar al de Digimon, pero diferente, no lo recuerdo en los quequitos, pero si en unos chocolates que se extinguieron hace mucho, en los combos para niños sí estuvo, juegos de cartas, peluches, y por último, el mejor lugar para saborear “Pokémon”, ¡los juegos! ¡Juegazos! Sumamente adictivos, entrenar a tu equipo, pelear en gimnasios, encontrar un shiny era suficiente para perder la cordura, pasar la Élite 4, etc… Pokémon representa una gran parte de la niñez de casi todos nosotros.
Ranma ½: No me dejaban verlo por el exceso de ecchi… pero igual lo hacía de vez en cuando, igual por esta razón, no tengo recuerdos muy claros… pero me gustaba Pecchan.
Sailor Moon: Yo no vi esto, no era mi tipo, está por ustedes, que quizá si crecieron con este famosísimo Mahou Shoujo.
Saint Seiya: Nuevamente, no me dejaban verlo, en esta ocasión, por los galones de sangre que perdían nuestros protagonistas, pero igual lo hacía, la historia era bastante buena para la época y la verdad, enseñaba buenos valores de perseverancia y lealtad, aunque lo tacharan de satánico muchas veces.
Sakura Cardcaptors: Otro anime satánico, bueno no, pero eso decían, yo solo repito lo que me enseñan. Recuerdo vagamente las cartas Clow y a Kero (creo que se llamaba así), uno de los favoritos de muchísimas personas alrededor del mundo.
Samurai X: Otro que no vi, pero no podíamos dejarlo afuera si tenemos en cuenta la fama con la que cuenta este anime.
Sandy y sus koalas: La serie más viejita de la lista, nunca la vi pero unos viejos amigos me hablaron de ella, y decidimos incluirla porque sabemos que en nuestra comunidad hay personas de muy diversas edades, que probablemente, también disfrutaron de esta.
Shaman King: ¡¡Amidamaru!! Esta definitivamente era muy buena, los personajes y la acción eran todo lo que un niño/puberto pudiera desear, el desarrollo de la historia es satisfactorio y no más, una serie que muchos amamos en su momento.
Super Campeones: La serie trata sobre la vida de Oliver Atom, y su pasión por el futbol. La cancha era interminable y algunos partidos eternos, otros demasiado cortos, aun así, ha sido la mejor animación sobre futbol que ha existido. ¿Quién no probó con alguien más la patada de los gemelos, o la chilena, o el tiro con chanfle? La frase: “El balón es mi amigo” se quedó con muchos de nosotros aún hoy. (Todavía la relación de Roberto con la madre de Oliver es interesante).
Trigun: ¡Vash Estampida! Un excelente anime de disparos, bastante peculiar. Yo personalmente lo vi ya estando más viejo, pero sé que muchos de ustedes atesoran recuerdos de su niñez junto a Vash y Wolfwood.
Yu-Gi-Oh: ¡Cartas Satánicas! *las quema*, esa es la historia de muchos de los que crecimos con Yu-Gi-Oh, era genial comprar sobres de 25 colones con cartas “paquetiadas” en la escuela, nuevamente, la serie no era gran cosa, lo interesante era el juego, ver quién conseguía el mejor deck, yo personalmente atesoraba a mi “Guardián Celta”, porque se parecía a Link. Algunos quizá recuerden el infame juego de Playstation 1 donde podías fusionar lo que te diera la gana, y si conseguías el Dragon de trueno de 2 cabezas, era Gg.
Yū Yū Hakusho: Fantasmas y peleas, a Yūsuke lo levanta un carro por salvar un niño y se muere, dispara energía espiritual por el dedo… es todo lo que recuerdo, no fue algo decisivo en mi infancia, pero quizá en la de ustedes sí.
Zatchbell: El torneo de los Mamodo da inicio, deben encontrar un compañero humano para que cuide sus libros y poder utilizar al máximo sus habilidades. Ponygon era el mejor, creo que aquí en televisión nacional nunca llegó a emitirse completo, recuerdo que lo reiniciaron 2 veces.
Zoids: Zoids era buenísima en muchos sentidos, la historia no estaba nada mal, los personajes eran simpáticos, el diseño de los Zoids era muy muy atractivo, y la canción de apertura que se quedó en el kokoro de la mayoría de nosotros.