Este fin de semana llegó a los cines Kingsman: The Golden Circle, secuela de la película de 2014 dirigida por Matthew Vaughn y protagonizada por Colin Firth, Samuel L. Jackson y Mark Strong. En esta nueva entrega, el director de Kick-Ass nos presentará a los Statesman, los primos norteamericanos de los Kingsman.

Como es normal, detrás de cada gran estreno hay buena polémica de la cual hablar. Esta vez se trata de una escena de la película en la que Eggsy (Taron Egerton) tiene que colocar un dispositivo de rastreo en un área muy íntima de la novia de uno de los villanos, Clara (Poppy Delevingne). La escena ha levantado mucha polémica, al ser demasiado explicita y obscena:

“Bueno, esa es la belleza del cine, ¿no? Tuvimos que conseguir una lente especial y colocar la cámara en una posición muy cerca de los cuerpos, pero no quería herirlos por error… Era una de esas cosas que podrían haber sido un desastre. En la mente de algunas personas sé que piensan que ya es un desastre porque no les gustó, lo cual está bien y lo respeto, pero a otras personas les encanta”; comentó el director a Vulture

El director también fue preguntado por este tema durante un encuentro con Uproxx, a lo que habló:

“Por primera vez quería ver a un espía con un dilema emocional y moral de tener que hacer algo que realmente no quiere hacer. Porque James Bond habría hecho eso, y probablemente habría tenido sexo, se habría fumado un cigarrillo y habría pensado, ¿quién es el siguiente? Eggsy es diferente. Y creo que es muy importante hacer escenas que hacen que la gente se sienta incómoda. Esa escena funciona muy diferente en la gente. Algunas personas se ríen y aplauden. Otras se quedan pensando: Oh Dios mío. Algunas personas están disgustadas por el momento, pero ninguna no se ha percatado de la escena, y después, hablan sobre ello. Y eso es lo que quiero hacer con las películas. Quiero que la gente lo discuta después. No quiero hacer películas blandas. Creo que hay suficientes películas hechas por comités de Hollywood que te llevan a la muerte. Estoy aquí para despertarte, de una forma u otra”.

Curiosamente, no es la primera vez que hay controversia sobre sexo, ya que en la primera entrega, Eggsy se encuentra con una princesa sueca convertida en rehén por el villano, y ella le ofrece tener sexo si consigue salvar al mundo.