El episodio número 100 de The Walking Dead fue uno de los estrenos peor recibidos desde la tercera temporada en 2012, y uno de los más flojos en la historia de la serie.
Los ratings de Nielsen, según Variety, para el episodio del domingo revelaron que un total de 11.4 millones de espectadores se unieron a la emición. En comparación, el estreno de la temporada pasada alcanzó 17.03 millones. Sólo la primera y segunda temporada tuvieron un menor número de audiencia.
Estos siguen siendo números fuertes en comparación con el resto de la industria, pero es una caída importante.