El repentino fallecimiento de Carrie Fisher en 2016 conmovió a todos los fans de Star Wars. Muchos se preguntaban qué sería de la nueva trilogía sin Leia como la líder de los rebeldes. De hecho, se cuestionó si cambiaría todo el concepto de la trilogía, ya que el Episodio IX se centraría en ella.

Conversando sobre The Last Jedi con el podcast Bullseye, Rian Johnson reveló que las primeras discusiones con Lucasfilm incluían considerar cambios potenciales de la trama de la película:

«Ella falleció cerca de Año Nuevo. Después de las vacaciones, fuimos a la sala de edición, revisamos todas sus escenas y tuvimos una conversación con Kathleen Kennedy. La pregunta surgió rápidamente: -¿Intentamos hacer algo? ¿Intentamos crear un final para el personaje o algo así? Decidimos que no y dejar su papel como estaba. Es imposible no cambiar la forma de verlo, sus escenas se vuelven mucho más complicadas al verlas de nuevo. Y luego, obviamente, su escena con Luke se convirtió en una escena de despedida mucho más profunda que antes».

Además, el director reconoció que no quería cambiar nada por si afectaba el trabajo artístico de Carrie Fisher:

«Su actuación fue maravillosa y pensé que si lo hacíamos, perderíamos parte de eso. Ya fuera la escena con Luke o la escena al final con Daisy Ridley en el Halcón. Quiero, especialmente ahora, dejar a Carrie Fisher hablar sobre la esperanza al final de esta película. Quería que el mundo tuviera esta actuación suya».