AMC recibe, otra vez, una demanda por su forma de gestionar The Walking Dead.

Continuando con la demanda del showrunner Frank Darabont, The Hollywood Reporter ha revelado que el co-creador de la serie Robert Kirkman, junto con los productores Gale Anne Hurd, Glen Mazzara y David Alpert, está demandando por daños, citando incumplimiento de contrato, interferencia tortuosa y actos empresariales injustos o fraudulentos.

El conflicto se debe a un desacuerdo sobre las ganancias del programa, y la acusación indica que AMC están vendiendo los derechos para el show por menos de lo que valen, mientras que también exageran sobre los costos de producción, resultando en menores ganancias estimadas por lo que el canal no paga como debe.

Todos los demandantes (con la excepción de Glen Mazzara) siguen trabajando activamente en el programa, por lo que es una relación laboral realmente incómoda. Las consecuencias podrían ser grandes ya que el creativo declara que se le deben $280 millones de dólares. Si Kirkman y los otros productores demandan por una cantidad similar, la pérdida para AMC es de más de 1000 millones de dólares.

La cantidad no se ha definido y el canal está negando las declaraciones, mientras que también profesa reafirman su «respeto y aprecio» por los productores, además de seguir trabajando en conjunto.