Game of Thrones tuvo algunos problemas durante su producción, ya que la productora recibió varias denuncias de los extras que estaban participando en España durante el rodaje.
Según denunciaron, estaban sufriendo de malas condiciones laborales durante los rodajes, jornadas interminables, horas extras no remuneradas, falta de descansos y la mala organización de las comidas. Hoy se confirma que han ganado la denuncia, ya que según reportan desde el medio El Español, Pablo Serrano, el extra que interpuso la denuncia, logró la victoria en los tribunales:
«Contratos de duración diaria o semanal firmados a posteriori de las fechas que en ellos se reflejan, teniendo que prestar servicios solicitado sin la formalización y aceptación de las condiciones de manera previa».
Según explicó Pablo Serrano, «después de comer les dan una hora para tumbarse y quitarse la armadura» y están «cumpliendo todo como se tiene que cumplir«. La productora decidió cambiar sus condiciones, aunque no sabemos si a futuro volverán a contratar a los mismos extras.