Los productores ejecutivos de The Walking Dead afirmaron que el tono violento de la serie no bajó, a pesar de lo afirmado por la productora ejecutiva, Gale Anne Hurd.

Fue el showrunner Scott M. Gimple quien comentó a Entertainment Weekly que el brutal primer episodio de la séptima temporada, estaba planeado para ser más violento de lo que vimos.

«Ese es el nivel base [de violencia] que necesariamente debe estar en la serie. Si alguna vez veremos algo así de pronunciado, necesita haber un propósito narrativo para eso».

Por su parte, el director y productor ejecutivo, Greg Nicotero, también confirmó a EW que los productores no variaron la violencia posterior a la retroalimentación de los fans:

«No creo que debamos editarnos y creo –incluso después de volver a ver el primer episodio– que, tan fuerte como fue verlo, no creo que lo hubiera hecho distinto».

Los comentarios, tanto de Gimple como de Nicotero, contradicen lo que la productora ejecutiva, Gale Anne Hurd afirmó sobre el tono.

Como saben, The Walking Dead regresa el próximo 12 de febrero.