“Por siempre una mujer de ojos grandes…”

“Sólo ella supo siempre que ninguna ciencia fue capaz de mover tanto, como la escondida en los ásperos y sutiles hallazgos de otras mujeres con ojos grandes”

Ángeles Mastretta

Siempre hemos escuchado que el espacio de la literatura nos transporta a nuevos mundos, pero algo mágico ocurre con aquellos textos que tienen la habilidad de ser parte de nuestra realidad, de la cotidianidad que vamos identificando y definiendo desde lo más profundo de nuestro ser, de nuestra esencia, de nuestro corazón.

La escritora mexicana Ángeles Mastretta nos ha regalado su cuentario “Mujeres de ojos grandes” y es el que hoy como escritora he elegido para inaugurar mi pequeño rincón literario. Un libro que aborda las historias de diversas mujeres, desde la simplicidad y cotidianidad del realismo literario ¡Simplemente mágico!

Quizás son muchas las preguntas que ese título tan particular nos genera ¿Por qué mujeres de ojos grandes? ¿Quiénes son? ¿Cómo son…? Un sinfín de incógnitas que la autora nos va definiendo con una mezcla entre ironía, humor, emoción y simpleza. Sin drama, las mujeres de ojos grandes enfrentan la vida.

Hay que leer cada uno de los cuentos, ellos esperan que sus protagonistas nos sorprendan con su determinación, con el hecho de ser mujeres reales. Cada historia y cada una de ellas tienen sus características; pero juntas son una mezcla de pasión, entrega, lucha, plenitud, seguridad, coraje e impulso que les permite tomar las riendas de su vida, de su identidad femenina, del poder de su conocimiento que está y sale desde lo más profundo de su ser.

Las mujeres de ojos grandes son aquellas que no temen enfrentarse a las alegrías, pruebas, dificultades, experiencias, temores e incluso dolores de la vida para disfrutarla. Las mujeres de ojos grandes experimentan su propia sabiduría, esa que va más allá del intelecto, es aquella que nos permite sentir, disfrutar y aprender desde nuestra determinación, inteligencia y emoción, del poder de ser y saberse mujer. La sabiduría de ser mujer para luchar por su vida.

Las mujeres de ojos grandes son mujeres valientes, heroínas modernas que se atreven a romper esquemas, deseosas de experimentar, de vivir, de sentir, de crear, de pensar, de ser. De ver desde su interior el mundo que las rodea y que pueden explorar, pero del que pueden crear y transformar con pequeños detalles y vivencias.

Cada cuento se puede leer de forma independiente, no tienen relación con otros, más que todos se desarrollan en Puebla y en el mismo contexto histórico; pero conforme avanzamos en la lectura y conocemos a cada una de las “tías” (todas llevan ese apelativo más su nombre) descubrimos el mundo de las mujeres fuertes que son llevadas de la realidad a la ficción literaria.

Las mujeres de ojos grandes se reconocen, se apoyan, se engrandecen unas a otras, las mujeres de ojos grandes tienen amigas de ojos grandes y eso las hace excepcionales, poderosas, fuertes, cómplices… No temen asumir sus decisiones por amor a ellas y al mundo que las rodea. El amor es su motor, su propia construcción y ven en el hombre el compañero de vida, lecciones, aprendizajes, experiencias, momentos, aventuras…

Las mujeres de ojos grandes se enamoran, se desenamoran, viven, sueñan, luchan, lloran, ríen, se caen, se sienten débiles pero se saben empoderadas, saben que la felicidad está en sus manos, que la crean, que la vida se les ha dado porque merece disfrutarse, que pueden llenar su mundo, el mundo, las vidas de luz; no porque sean perfectas sino porque saben que el mundo solo puede verse “con los ojos grandes” de la lucha y el amor.

¡Para todas aquellas mujeres de ojos grandes!