Assassins Creed puede ser una película decisiva para el futuro de las películas de videojuegos. En el pasado, fiascos como la película de Mario Bros, Resident Evil, Need for Speed e incluso Pixels han generado una pésima reputación para las películas basadas en videojuegos. Warcraft, con una calificación de 28% en Rotten Tomatoes y un presupuesto de $160 millones, recaudó menos de $50 millones en taquilla en EEUU, salvada sólo por la taquilla china, llegando a una recaudación mundial de más de $400 millones.
Assassins Creed lleva bajo sus hombros una enorme responsabilidad: según su éxito puede convertir en viables las películas de videojuegos o terminar de hundirlas.