Una investigación realmente off-topic que fue publicada en una revista científica.
¿Preparados para viajar a Mordor? Están de suerte, ya que los investigadores Skye Rosetti y Krisho Manaharan de la Universidad de Leicester (Reino Unido), han publicado en la revista Journal of Interdisciplinary Science Topics que la Comunidad del Anillo (de la obra original de J.R.R. Tolkien, El Señor de los Anillos) consumieron una cantidad total de 1.780.214,59 calorías en su viaje desde Rivendell a Mordor con el fin de destruir el Anillo Único.
Esta investigación sin duda es algo extraña. pero en realidad es el segundo estudio que ha sido publicado sobre este tema, por lo cual podemos decir que es o será un tema recurrente. La investigación anterior determinó que los hobbits necesitan una ingesta diaria de 1.800 calorías, los elfos de 1.400, los hombres alrededor de 1.700 y los enanos con una estructura como Gimli necesitan 2.300 calorías. En este caso, los investigadores se han centrado en la figura de las lembas.
Asumiendo que el viaje desde Rivendell hasta la Grieta del Destino toma alrededor de 92 días y que las calorías calculadas para una lemba son de 2.638, después de algunos cálculos el resultado determina que se necesitarían unas 675 piezas de pan para completar esta misión. Ahora hablemos de otra variante, cada raza tiene un metabolismo diferente, por eso que entre todos los hobbits del grupo se necesitan unas 304 piezas de pan, mientras que el grupo de Gandalf, Aragorn y Boromir comerían solo unas 214 piezas. Los elfos y enanos, Gimli y Legolas tendrían el resto que son un total de 60 piezas.
Algunos de los aspectos de este estudio recaen en que los autores han calculado un «viaje ideal», osea que los nueve componentes de la Comunidad del Anillo permanezcan vivos y unidos hasta llegar a su destino. Además, Gandalf y Aragorn se usaron como modelos de humanos ordinarios, osea nadie podría comer más de lo que se calculó. Aquí podemos argumentar sobre el resultado ya que los hobbits son conocidos por glotones.
Aunque el estudio está interesante, no sabemos exactamente cuál es el metabolismo de los elfos por ejemplo. Pero no deja de ser curioso ver un artículo científico inspirado en El Señor de los Anillos.