El relato de hoy presenta una historia en la que el vampirismo se puede curar: "Solo sale de noche...", de William Tenn.

El autor

Escritor estadounidense de origen británico cuyo verdadero nombre fue Phillip Klass, famoso por sus historias con corte satírico.

En su vida publicó artículos académicos, ensayos, dos novelas y más de 60 historias cortas; empezó a escribir mientras trabajaba en Bell Labs; también dio clases durante 22 años, uno de sus estudiantes fue el creador de Rambo: David Morrell.

Phill Klass y su esposa Fruma fueron miembros del Consorcio de Entusiastas de la Ciencia Ficción en tiempo real del área de Pittsburg (PARSEC por sus siglas en inglés); además Kalss fue Invitado de Honor en Convención Mundial de Ciencia Ficción del 2004 y en LOSCON 33 del 2006.

El relato

Publicado en 1956 en la revista Fantastic Universe, “Solo sale de noche...” es más una historia de amor que de terror. El relato sí muestra los estragos causados por una vampiresa, pero se enfoca más en el amor entre los protagonistas del cuento.

En la historia, el doctor Judd lucha contra una extraña enfermedad que está matando a los niños del pueblo, hasta que descubren que ésta es causada por una vampiresa llamada Tatiana Latianu, que resulta ser la novia del hijo del doctor, Steve.

Tom, un amigo de la familia, es de Transilvania, por lo que conoce todo sobre los vampiros, y el doctor Judd termina ayudando a la joven a dejar esta condición, por más extraño que parezca.

“Solo sale de noche...” no puede ser tomado como un relato serio de vampiros, más bien es una sátira humorística, que busca ironizar sobre el popular mito y los elementos que se emplean en este tipo de historias.

Por lo tanto, este es un cuento que puedes leer si buscas algo ligero y diferente. Si prefieres historias más serias, te recomendamos nuestras notas anteriores:  Carmilla, Almas en pena, Cuando había luz de luna, Entre la nieve, Almas en pena, La Capa, Pues la sangre es vida, El misterio de Ken, La muerta enamorada, Cuando había luz de luna, Herencia, La última tumba de Lill Warran y El vestido de seda blanca.