Continuando con nuestro especial de la saga de Saw, en esta ocasión hablaremos de la secuela que nadie esperaba, pero que llegó para marcar el inicio de una saga que aún hoy se mantiene viva. La segunda parte de Saw trajo además de un nuevo enfoque, nuevos personajes y sobre todo exploramos más el trasfondo del antagonista principal de la película y entendemos un poco más sobre sus juegos macabros y las razones por las cuales escoge a sus víctimas específicamente para esta película. 

Saw 2 llegó a los cines de manera sorpresiva a finales del 2005, casi inmediatamente detrás de su predecesora, solo que esta vez llevó a la saga a nuevos límites y su director Darren Lynn Bousman se aventuró a darle un giro a la historia del antagonista e incluso trajo de nuevo caras conocidas a la saga. Además de esto, al igual que la anterior película, tuvo un modesto presupuesto de $4 millones pero logró recaudar en taquilla más de $100 millones, lo que abrió un portillo para extender la saga a un universo completo de películas. 

Más sangre, más terror, más Jigsaw

Si bien el trabajo que hicieron en la primera parte los directores James Wan y Leigh Whannell fué impecable, innovador y pionero, para esta segunda parte vimos de manera más profunda la retorcida mente de Jigsaw y podemos también apreciar como los límites para torturar a sus víctimas se expanden de uno o dos, a un grupo de 8 extraños que serían parte de sus juegos macabros. También vimos que la fotografía mejoraba considerablemente en respecto a la anterior entrega, esto tal vez porque el presupuesto fue un poco más elevado.

Otro detalle interesante de esta secuela, es que se utilizó el triple de sangre y más escenas violentas que en Saw 1, lo cual nos indicó desde la primera trampa, que esta película sería aún más sangrienta y que Jigsaw no estaba jugando. Esto porque muchos de los fans de la nueva saga así lo hicieron ver en algunas encuestas que lanzó la cadena MTV™ junto a Lionsgate International justo antes de las grabaciones de la segunda parte. Además se usaron más locaciones para el juego principal lo que emocionó aún más al público. 

La casa de los horrores 

Como indicamos al inicio de esta nota, en esta ocasión el juego se amplió a más jugadores y se trajo de vuelta  a uno de los sobrevivientes de Jigsaw de la primera película. El plot de la película era bastante interesante, reunió a un grupo de extraños que al parecer tenían algo en común, pero que ninguno pudo entender, hasta que ya fué muy tarde. 

Entre esos extraños se encontraba Amanda, la única sobreviviente de los juegos de John Cramer hasta ahora, ella además sería quien trataría de ayudar a los nuevos participantes ya que desde su despertar estaban respirando una toxina mortal y tenían solo unas cuantas horas para encontrar los antídotos repartidos en la casa.

Para esta vez, Jigsaw reunió a las víctimas de falso testimonio del detective Mathews, las cuales habían caído en la cárcel por sus tretas; junto a ellos estaba el hijo de éste, como incentivo para dar más interés al juego o como lo dijo el mismo Jigsaw para darle un motivo a Mathews de jugar. con la frase “lo único que tiene que hacer para volver a ver a su hijo es quedarse aquí y hablar conmigo” dio inicio uno de los juegos más sádicos de la saga Saw.

Entre las nuevas trampas que pudimos ver en esta película, están el horno del diablo que aun y con todo lo que conlleva ser cocinado vivo, Jigsaw ofreció la oportunidad de salvarse a su víctima, otra trampa polémica es la caja de navajas, que al parecer la única finalidad era que la víctima perdiera sangre y no se salvara realmente o la más dolorosa de la película, la piscina con agujas y un solo antídoto, a la cual fue lanzada Amanda. Al final el mensaje que nos dejo la película es no confiar en nadie, ni en supuestas alianzas, ni en un asesino diabólico y mucho menos en monitores que no tenían ni siquiera una imagen en vivo. 

Curiosidades

• Para esta película solo Tobin Bell (Jigsaw) sabía el final, ya que fué al único al que se le entregó el guión real. 
• Con el fin de evitar filtraciones, se grabaron  finales alternos y ninguno de los actores del juego sabía cuál era el real. 
• James Wan no regresó como director para la segunda parte pero si sirvió de asesor a Bousman en cuanto a las trampas.
• En la escena de la trampa de las jeringas, se utilizaron más de 150 mil de estas para llenarla y 5 días para reemplazar todas las agujas por las de utilería. 
• Se recreó el set de la primera película de manera completa ya que el original había sido destruido. 
• Los primeros posters promocionales de la película fueron retirados de todos los cines ya que no cumplian con el lienamiento de censura internacional.