Un hecho importante en los últimos años en cuanto a la industria de los videojuegos fue el lanzamiento de Kinect para Xbox 360, un periférico que permitía al usuario interactuar con la consola de una forma fantástica, pero éste hecho dividió a los usuarios en los que tenían Kinect y los que no.

Xbox One dijo antes del lanzamiento que no funcionaría sin Kinect, algo que tuvieron que desmentir, ya que al vender la consola por 100 euros por encima del precio de su competencia, PlayStation 4, tuvieron que vender un pack sin Kinect por el descontento de los usuarios de no tener opción a elegir y tener que pagar más sí o sí.

Mike Nichols, director de márketing de la división de Xbox en EEUU, ha hablado sobre este hecho, asegurando que aunque aún no esté demasiado implementado el uso de Kinect dentro de los juegos, permite hacer al usuario un login biométrico e interactuar con la consola.

El mismo ha dicho que según datos oficiales proporcionados por distintas encuestas que la mayoría de los usuarios usan Kinect en sus consolas. Los de Redmond afirman que es un dispositivo que marca la diferencia e insisten en ello, aunque están de acuerdo en que debería de haber más juegos orientados al mismo.

Con la llegada de Cortana a la plataforma se espera que se utilice más este periférico, ya que al usar comandos de voz tendría una gran funcionalidad.